
A partir del 13 de octubre, los neoyorquinos desempleados recibirán un beneficio semanal máximo de $869, un aumento significativo desde los $504 anteriores, anunció la gobernadora Kathy Hochul. La medida llega en un contexto de incertidumbre económica, agravada por el cierre parcial del Gobierno federal, que ha dejado sin ingresos a 115,000 empleados federales en el estado.
Hochul explicó que este incremento fue posible gracias a una inversión de $7 mil millones para liquidar la deuda del Fondo Fiduciario del Seguro de Desempleo, que se vio afectado durante la pandemia. «En Nueva York, protegemos a nuestros trabajadores, mientras que en Washington solo hay paralización», afirmó.
El nuevo monto máximo no solo beneficiará a quienes reciben el pago más alto, sino que también reajustará los beneficios de otros trabajadores, según sus ingresos previos. Además, las empresas verán reducidos sus costos, con ahorros de $100 por empleado en 2026 y $250 en 2027, al eliminarse el Recargo por Intereses (IAS).
Este cambio busca modernizar el sistema y garantizar su sostenibilidad en el futuro.