
El oro ha alcanzado este miércoles un hito histórico al cotizarse en US$4,009.90 por onza troy en los contratos a futuro para diciembre de 2025, superando todos los récords anteriores y consolidándose como el activo refugio por excelencia en un mundo financiero cada vez más inestable. Este rally sin precedentes —con proyecciones que lo sitúan en US$4,250-US$4,280 en un año— es el resultado de una tormenta perfecta:
- Desdolarización: Economías emergentes reducen su dependencia del dólar.
- Crisis geopolíticas: Guerras y sanciones aumentan la demanda de activos seguros.
- Incertidumbre económica: Inflación y recesión llevan a los inversores a buscar refugio.
Plataformas como Bloomberg (US$4,009.10), Investing.com (US$4,007.10) y Inversoro.es (€3,370.60) confirman que el oro es el activo más buscado del momento.
En República Dominicana, este boom del oro tiene un impacto económico directo. El economista Henri Hebrard destacó que el precio ha subido un 50.7% en el último año (de US$2,638.08 a US$3,976.30), con un récord semanal de US$3,093.86. El país, que exporta oro a mercados como India, Canadá y EE.UU., podría superar los US$3,000 millones en ingresos en 2025, gracias a minas como Pueblo Viejo (que aportó RD$12,500 millones) y la expansión de Barrik Gold, que mantendrá la producción por encima de las 800,000 onzas anuales.
El Gobierno dominicano, que en su presupuesto 2025 estimó un precio de US$2,500 por onza, podría ver un superávit fiscal gracias a este repunte histórico, especialmente en impuestos como el ISR y la PUN. Mientras tanto, proyectos como la mina Romero en San Juan podrían acelerar su explotación para capitalizar este momento excepcional del mercado.