El reciente acuerdo de cielos abiertos firmado entre Estados Unidos y República Dominicana ha suscitado reacciones diversas. Mientras algunos, especialmente en el sector público, ven en este pacto una oportunidad para reducir los elevados precios de los boletos aéreos, otros, como los pilotos y la Asociación de Aerolíneas del país, lo consideran una «falsa expectativa».
Los economistas, en general, se muestran optimistas ante las ventajas que el acuerdo puede traer, incluyendo un aumento en la inversión, mayor competitividad y un incremento en el intercambio comercial y turístico. Estas expectativas también incluyen una posible reducción en los precios de los pasajes aéreos.
Sin embargo, los pilotos temen que este acuerdo pueda llevar a la desaparición de las aerolíneas nacionales y que los precios de los boletos no disminuyan como se espera.
Ventajas
Según los economistas consultados, el pacto, que consta de 17 artículos, ofrece numerosas ventajas. Permite a las aerolíneas de los países firmantes operar vuelos entre ambos países sin restricciones significativas, lo que podría beneficiar a los pasajeros mediante una economía de escala. A medida que las aerolíneas operan más vuelos y transportan más pasajeros en rutas populares, los precios de los boletos podrían bajar.
Antonio Ciriaco, decano de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), señala que en muchos casos donde se han establecido acuerdos de cielos abiertos, los precios de los boletos aéreos han disminuido debido a la competencia.
“Un boleto aéreo, por ejemplo, hacia una zona en Puerto Rico, puede costar hasta 500 dólares por un vuelo de media hora, con impuestos representando casi un 30% del costo total”, explicó Ciriaco.
Los impuestos significativos en el país son una de las razones por las cuales los boletos comprados en República Dominicana son más caros que los adquiridos en el extranjero. Por ejemplo, un boleto ida y vuelta de Santo Domingo a Nueva York comprado en el país cuesta entre 400 y 600 dólares, mientras que comprado desde Estados Unidos, cuesta entre 300 y 500 dólares. Incluso, un vuelo de Nueva York a Londres, a pesar de la mayor distancia, cuesta alrededor de 500 dólares.
Andrés Marranzini, miembro de la Junta de Aviación Civil (JAC), se muestra optimista sobre una posible reducción en los precios de los pasajes aéreos.
Desventajas
Por otro lado, pilotos y otros sectores de la aeronáutica nacional consideran que el acuerdo beneficiará más a Estados Unidos que a República Dominicana. Las aerolíneas estadounidenses tienen una posición mucho más fuerte en términos de flota, tecnología y capacidad de capturar una mayor cuota del mercado en comparación con las pocas aerolíneas dominicanas actuales: Air Century, Arajet, Sky High y Red-Air.
El capitán Francisco J. Díaz, presidente de la Asociación Dominicana de Aviación General, afirmó: “Ellos tienen el 99% de las rutas. No creo que podamos bajar los precios significativamente ni crecer como aerolíneas debido a la competencia desigual”.
La Coalición de Pilotos Dominicanos también expresó en un comunicado que “el nuevo tratado representa un gran reto para la aviación civil dominicana, dado el gran tamaño de las aerolíneas con las que tendrán que competir”.
Los economistas reconocen que la débil posición de las aerolíneas nacionales podría tener un impacto negativo, basado en lo ocurrido en otras naciones que han suscrito este tipo de tratado con Estados Unidos.