En el corazón de Washington Heights, donde la comunidad dominicana ha tejido una red de apoyo y fraternidad, se vivió una jornada llena de emoción y solidaridad durante la novena entrega anual de pavos y alimentos organizada por Rubén Luna, presidente de Diplomacia por la Paz Mundial (DWP), y respaldada por el Cónsul Dominicano en Nueva York, Jesús Vásquez. Este evento, que se ha convertido en una tradición de generosidad y unidad, benefició a más de 5,000 familias dominicanas, quienes recibieron un pavo y una bolsa con más de 50 libras de alimentos esenciales para celebrar el Día de Acción de Gracias con dignidad.
El Cónsul Vásquez, quien se unió a la celebración para reconocer y apoyar la labor de Rubén Luna, destacó que iniciativas como esta reflejan el espíritu de servicio y solidaridad que caracteriza a la comunidad dominicana en la diáspora. «Es un honor ser testigo de cómo nuestra gente se une para ayudar a quienes más lo necesitan», declaró Vásquez, quien resaltó que el verdadero valor de esta acción trasciende lo material: «No solo se entregan alimentos, sino también un mensaje de esperanza y apoyo en momentos difíciles».
Un legado de servicio y esperanza Rubén Luna, conocido por su compromiso incansable con las familias más vulnerables de Washington Heights, explicó que cada bolsa entregada contiene productos básicos como habichuelas, arroz, leche evaporada y otros alimentos no perecederos, todos recolectados gracias a la colaboración de empresas locales y voluntarios que trabajaron durante todo el año para hacer posible esta jornada. «Cada año, nos esforzamos por llegar a más familias, porque sabemos que muchas de ellas dependen de esta ayuda para celebrar el Día de Acción de Gracias con dignidad», afirmó Luna, quien agradeció el apoyo de los donantes y la labor de los voluntarios que hicieron posible la logística del evento.
El Cónsul Vásquez, por su parte, elogió el trabajo de Rubén Luna y lo describió como un ejemplo de liderazgo y compromiso comunitario: «Rubén es una persona que ha dedicado su vida a servir a los demás. Su labor no solo alimenta a las familias, sino que también fortalece el tejido social de nuestra comunidad». Además, destacó que este tipo de acciones engrandecen a la República Dominicana y demuestran el amor y la solidaridad que definen a los dominicanos en el extranjero.
Testimonios que conmueven Entre las familias beneficiadas, María Encarnación, residente de Washington Heights, expresó su gratitud con lágrimas en los ojos: «Esto es una bendición para mi familia. En estos tiempos difíciles, saber que hay personas que piensan en nosotros es un gran alivio». Luis Rodríguez, otro de los beneficiados, compartió: «Gracias a esta ayuda, mi familia podrá disfrutar de una cena digna en Acción de Gracias. Me siento contento y agradecido». Ana Carvajal, vecina del sector, añadió: «Rubén Luna y su equipo siempre están presentes cuando más los necesitamos. Su trabajo es un ejemplo de lo que significa ser solidario».
El evento, que comenzó con una bendición del párroco de la Iglesia de la Encarnación, se desarrolló en un ambiente de alegría y fraternidad, reafirmando el compromiso de líderes como Rubén Luna, Abul Hossain y el Cónsul Jesús Vásquez con la comunidad dominicana en Nueva York. «Espero seguir apoyando iniciativas como esta, porque demuestran lo grande que es nuestra comunidad», concluyó el Cónsul, quien también destacó que el verdadero valor de esta acción radica en el gesto de amor y solidaridad, más allá del apoyo material.
La celebración del Día de Acción de Gracias en Washington Heights volvió a demostrar que la solidaridad es un lenguaje universal que une, inspira y fortalece a la comunidad dominicana en la diáspora, reafirmando los valores de unidad, gratitud y servicio que caracterizan a esta vibrante comunidad.

