Este martes se reanudará la selección del jurado. Trump se declaró no culpable de los 34 cargos penales en su contra.
El juicio contra el expresidente Donald Trump en el caso en que se le acusa de alterar registros financieros para encubrir pagos hechos para silenciar noticias sobre su vida sexual se reaunuda este martes con el arduo proceso de seleccionar a los miembros del jurado.
La búsqueda para encontrar un jurado de 12 personas y seis suplentes tuvo un comienzo lento el lunes, ya que más de la mitad de los 96 posibles jurados convocados a la sala del tribunal de Manhattan dijeron que no podían ser «justos e imparciales» cuando se trata de Trump.
“Están por participar en un juicio con jurado. El sistema de un juicio con jurado es una de las piedras angulares de nuestro sistema judicial”, dijo el juez hispano Juan Merchán. “El nombre de este caso es el Estado de Nueva York vs. Donald Trump”.
Los miembros restantes del posiblejurado del primer grupo continuarán respondiendo preguntas el martes por la mañana antes de que los fiscales de la oficina del fiscal de distrito de Manhattan y los abogados de Trump hagan preguntas de seguimiento.
Después de eso, pasarán al siguiente grupo de 96. Merchán ha estimado que el proceso llevará de una a dos semanas.
El presunto candidato republicano a la presidencia se declaró no culpable de 34 cargos de falsificación de registros comerciales, un delito grave punible con hasta cuatro años de prisión. Debe estar presente durante todo el juicio, que podría durar hasta ocho semanas.
Este es el primer juicio penal de la historia contra un expresidente estadounidense y limitará la disponibilidad de Trump en la recta final de su campaña, aunque se espera que hable frecuentemente ante los medios.
EN DUDA SI PODRÁ IR A LA GRADUACIÓN DE SU HIJO
Trump protestó este lunes por las trabas del juez Merchán a que se ausente del juicio penal en su contra en Nueva York, después de que este rechazara excusarlo la semana que viene para la vista sobre su inmunidad en el Supremo de EEUU ni los miércoles, que tiene en teoría libres.
Al concluir la primera jornada del juicio, la defensa de Trump pidió al juez que lo excusara el jueves de la semana que viene, cuando está previsto que el Supremo trate los argumentos sobre inmunidad presidencial que pueden afectar a otros casos penales que afronta, según los periodistas presentes en la sala.
El magistrado dejó en el aire la posibilidad de que Trump pueda asistir a la graduación de su hijo menor, Barron, el 17 de mayo, por la lejanía de la fecha; no obstante, el expresidente asumió esa falta de confirmación como una negativa más al arremeter contra el juez, e incluso la antepuso al resto.
«Como saben, mi hijo va a graduarse en la escuela secundaria y parece que el juez no me dejará ir (…) y no puedo ir al Tribunal Supremo de EEUU, y no (estaré) en Georgia ni Florida ni Carolina del Norte haciendo campaña, como debería. Es perfecto para los demócratas de la izquierda radical», comentó.
DE QUÉ SE LE ACUSA A DONALD TRUMP
Los cargos se relacionan con la candidatura de Trump a la presidencia en 2016. Los fiscales de la oficina del fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, alegan que participó en un plan con su entonces abogado Michael Cohen y el editor del National Enquirer para suprimir historias escandalosas sobre él en el antes del día de las elecciones.
Una de esas historias involucró a la estrella porno Stormy Daniels, quien alegó haber tenido un encuentro sexual con Trump en 2006. Trump ha negado la acusación y Cohen le pagó a Daniels $130,000 en octubre de 2016 para que guardara silencio sobre la acusación.
Después de ser elegido, Trump devolvió a Cohen pagos registrados como honorarios legales en su empresa, documentos que, según alega el fiscal, fueron falsificados para mantener en secreto los pagos de dinero por su silencio.
El documento judicial alega que el esquema para ocultar estos pagos era ilegal, pero no nombra los estatutos que violó. La acusación alega un esquema criminal para ocultar información crucial a los votantes. Pero los únicos cargos son la falsificación de registros comerciales.
Trump y su equipo de defensa han negado en repetidas ocasiones y en voz alta cualquier irregularidad.
Trump ha sostenido que no hizo nada malo y se burló del caso como parte de una “caza de brujas” políticamente motivada en su contra, afirmación que ha utilizado para galvanizar a sus seguidores y recaudar millones de dólares en recaudación de fondos para su campaña.
El caso penal es el primero de cuatro presentados contra Trump en cuatro jurisdicciones diferentes y es el único caso que definitivamente irá a juicio antes de las elecciones.
Por The Associated Press